COMPROMISO CRISTIANO EN ESTOS ÚLTIMOS TIEMPOS

Hebreos 10:23-25; 37. 1 Pedro 4:3-19

Los creyentes nunca debemos perder de vista las implicaciones para nuestras vidas por el inminente regreso de Cristo a levantar su Iglesia.

Contrastes:

El primero entre: El tiempo pasado... y el tiempo que resta.

El segundo entre: Los deseos de los hombres... y la voluntad de Dios.

I. PONIENDOLE FIN A LAS TENDENCIAS PASADAS v.3. Rompiendo con el pecado

La palabra "baste" en este texto es la equivalente a "suficiente".

Grandes males que caracterizan a nuestra sociedad:

1. La perversión sexual en sus diferentes manifestaciones.

2. El consumo de alcohol y drogas.

3. La substitución de la adoración a Dios con "abominables idolatrías".

4. Violencia en todos los aspectos. Barrios. Ciudades. Hogares. Familia. Colegios. Países.

5. Poco respeto por la vida.

-No desperdiciemos «el tiempo que resta» corriendo con el mundo y pecando.

II. CONSAGRADO A DIOS V 4-5

El fundamento de la salvación es que hemos creído en Jesucristo, pero el fundamento para el juicio es cómo hemos vivido.

III. ORANDOPERMANENTEMENTE. V 7

Fueron muchas las veces en que el Señor Jesucristo dijo a sus discípulos “Velad y Orad” con el propósito de que no entraran en tentación.

- Orar siempre. Con perseverancia. Lucas 18:1. Romanos 12:12.

-Orar sin cesar. 1 Tesalonicenses 5:17.

-Orar en todas partes. Todo lugar. 1 Timoteo 2:8.

-Orar en todo tiempo. Efesios 6:18.

-Orar con dedicación. Colosenses 4:2

Los creyentes somos llamados a entender que la santidad, el sello de nuestro andar: es manteniéndonos velando en oración.

IV. AMANDO DE TODO CORAZON. V 8-9

El amor hacia los hermanos es la acción que domina y hace permanecer vivo en el creyente el amor de Dios. 1 Tesalonicenses 4:9-10. 1Juan 4:20-21.

V. SIRVIENDO A LOS DEMAS. V 10.

VI. TESTIFICANDO ACERCA DE CRISTO. V 11.Hechos 1:5-8.

VII. PERMANECIENDO FIEL A DIOS AUN EN MEDIO DE LAS PRUEBAS. V 12-19.

¿Por qué debemos vivir de esta manera?v. 5. El día de rendir cuentas.

Conclusión:

El tiempo que nos resta es muy corto. Pronto escucharemos el gran toque de trompeta.

El creyente debe estar consagrado, trabajando, sirviendo, en unidad y santidad.

El no creyente debe arrepentirse de todos sus pecados. Entregarle su vida a Cristo y empezar a vivir para El.